A finales del pasado mes de marzo, el proyecto de ley No. 352/20S–429/20C, mediante el cual se regula el trabajo en casa y se dictan otras disposiciones, fue aprobado en el Congreso de la República. La iniciativa entra a conciliación con la Cámara de Representantes y posteriormente pasará a sanción presidencial.
Con esta iniciativa se brindan los parámetros y marco general que fija los beneficios y límites para empleadores y trabajadores en esta modalidad, derivados de las circunstancias generadas por la pandemia, la cual surgió como una necesidad de regular los temas laborales y de trabajo en el país dentro de la nueva realidad, ya que actualmente no existe normativa relacionada con este tema particular, al considerarse que el 93 % de las personas realizan labores domésticas mientras trabaja y se pretende conciliar la vida laboral y familiar.
El proyecto de ley establece además que este esquema de trabajo puede ser aplicado en circunstancias especiales de orden público, tales como la que estamos viviendo relacionada con la emergencia sanitaria ocasionada por la pandemia causada por el Covid – 19. El articulado define que esta modalidad de trabajo en casa, debe fundamentarse en la prestación de las labores o funciones en un lugar diferente a las instalaciones de la empresa o entidad empleadora, determinando que se pactará en un principio por tres meses, los cuales pueden ser susceptibles de extenderse según la necesidad entre las partes. Igualmente, esta normativa determina la necesidad de llegar a acuerdos entre trabajadores y empleadores sobre la alternativa de trabajo en casa con todos los elementos que lo componen.
Esta nueva atmósfera laboral trae consigo diversos retos que exigen al empleador considerar varios elementos relacionados con la conectividad a internet, entre otros; aspecto que eventualmente sustituye el auxilio de transporte por un auxilio de conectividad digital, que será equiparable si la empresa está bajo la modalidad de trabajo en casa. De la misma manera, la norma introduce conceptos innovadores como la desconexión laboral, al cual se le confier el rango de derecho fundamental del trabajador y el que consiste en el derecho de abandonar las actividades laborales cuando termine la jornada legal establecida de ocho horas diarias y de 48 horas a la semana.
En este punto no debe perderse de vista que el concepto de trabajo en casa debe diferenciarse de teletrabajo, puesto que en el primer caso la vinculación laboral es transitoria o temporal, mientras que en el segundo caso la modalidad es permanente y se debe pactar desde el inicio del contrato de manera expresa y por escrito.
A continuación,presentamos un breve esquema de los principales aspectos del proyecto de ley que pronto será una realidad:
Finalmente, les dejamos a nuestros lectores el texto completo del proyecto de ley: